n. fem. Descubrimiento fortuito de algo malo. Un ejemplo de zemblanipia es encontrarte a tu pareja con otro al entrar en tu casa.
Etimología
Propuesta de acomodación del inglés zemblanity, término creado por el escritor escocés William Boyd como opuesto de serendipia ‘descubrimiento fortuito positivo’ por ser Nueva Zembla un lugar inhóspito. Para la forma en español se ha tomado precisamente la terminación de serendipia.
Variantes: zemblanidad.