adj. Que se puede besar, que permite ser besado o apetece besarlo. La barba te deja pocas zonas besables en la cara; Se puede considerar lo suficientemente atractivo para ser besable.
Etimología
Más información
• Lo usa, por ejemplo, Javier Marías en Corazón tan blanco (1992): «No tenemos más que darnos la vuelta y ver entonces, de frente, el rostro del que nos protege, que se dejará besar lo que en el rostro es besable (nariz, ojos y boca; mentón, frente y mejillas; y orejas, es todo el rostro)».